El sabotaje a los exámenes de admisión de mujeres revela la cultura orientada a los hombres en el ramo médico.
En días recientes se descubrió que la Universidad Médica de Tokyo alteró las puntuaciones de aplicantes mujeres para limitar su entrada a la universidad, generando controversia. Para muchos, es una prueba de que las mujeres todavía se enfrentan a barreras para avanzar en la sociedad.
La escuela privada comenzó a reducir la puntuación de aplicantes mujeres en el 2010, cuando el número de mujeres admitidas comenzó a aumentar. La práctica fue diseñada para reducir el número de mujeres médicas en el hospital de la propia universidad, ya que los directivos creían que era más probable que se ausentaran o renunciaran al tener un hijo.
“Reducir deliberadamente el número de mujeres que pasan el examen es contrario a nuestros tiempos,” dijo Kyoko Tanebe, miembro de la Asociación Japonesa de Mujeres Médicas Profesionales, “se necesita la visión de las mujeres para lograr reformas laborales para las mujeres médicas.”
Hacer el trabajo más cómodo para las mujeres es parte central de la reforma laboral en Japón. La Universidad Médica de Tokyo es una clara muestra de cómo el pensamiento centrado en el hombre ha atrasado este progreso. Las mujeres componen una parte menor de médicos que el promedio mundial. En el 2016, 21.1% de los médicos del país eran mujeres, de acuerdo al Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar. Esta cifra queda opacada al ser comparada con el promedio mundial de 46% en el 2015 entre miembros de la OCDE. En países como Latvia y Estonia le número llega al 70%, y en Reino Unido, Alemania y otros países europeos está por encima del 40%.
Las acciones de la Universidad Médica de Tokyo son consideradas como “una injusticia extraordinaria” en palabras de un oficial del ministerio de educación, quien describió la práctica como añadir factores no mencionados en el formato de reclutamiento. El ministerio puede retirar su apoyo de 2 mil millones de yenes (18 millones de dólares) a la universidad.
La reducción en la puntuación salió a la luz en una investigación interna por abogados e investigadores. Oficiales, incluyendo al ex presidente, fueron castigados. Una fuente admitió que la universidad reducía la puntuación de las mujeres, ya que, de no hacerlo “permitiría que muchas mujeres pasaran.” De acuerdo a la fuente, “las mujeres dejan el trabajo en mayor proporción [que los hombres], y queda a discreción de la universidad escoger qué estudiantes acepta.”
La práctica puede ser que no sea exclusiva de la Universidad Médica de Tokyo.